Francisco de Montesdoca

Utrera ca. 1526 – Orbitello 1593

Biografía

Francisco de Montesdoca fue un militar español que ostentó el cargo de gobernador militar de Maastricht entre los años 1569 y 1577. Nacido en Utrera (Sevilla) hacia 1526, Montesdoca se alistó en el ejército de la Monarquía cuando contaba aproximadamente dieciséis años.

Aunque sabemos poco sobre su trayectoria militar, especialmente los años previos a su estancia en Flandes, gracias al biógrafo de su lugar de origen Rodrigo Caro, podemos esbozar algunos de los momentos más relevantes en su vida como militar. Hacia 1550, ya bajo las órdenes del duque de Alba, Montesdoca fue nombrado capitán. [1] Según su Caro, participó en diversas campañas notables como parte del tercio de don Álvaro de Sande. Así, Montesdoca habría estado presente en las guerras en Hungría durante la Guerra de Esmalcalda (1546-1547) y en la expedición fallida en Djerba (1560). El punto álgido de su carrera militar antes de su estancia en Flandes sería su participación en el socorro de la isla de Malta en 1565. [2]

Cuando Felipe II envió al duque de Alba a Flandes, Francisco de Montesdoca se unió al ejército como parte del Tercio de Nápoles y entre septiembre y mayo de 1569, formó parte de la guarda personal del duque de Alba.

Tras la primera campaña militar del duque en los Países Bajos, los soldados del ejército fueron destinados a diversas plazas más o menos fortificadas a lo largo del territorio para mantener la “paz” que el duque de Alba había logrado tras su intervención militar. Montesdoca fue destinado a Maastricht, donde fue nombrado gobernador a cargo de ocho compañías de españoles. La situación iba a ser temporal, puesto que el duque tenía planeado construir un castillo en Flesinga, en la provincia de Zelanda y nombrar a Montesdoca castellano y gobernador de la plaza. Sin embargo, el inicio de la conocida como ‘Segunda Rebelión’ tras la toma de Brill el 1 de abril de 1572 por los mendigos del mar, convirtió a Flesinga en uno de los territorios que permanecieron casi permanentemente bajo la influencia de los hombres del príncipe de Orange. Como alternativa al cargo prometido, el duque recompensó a Montesdoca por sus servicios otorgándole el cargo de coronel de alemanes, un título parecido en rango al de maestre de campo español.

Desde entonces, Francisco de Montesdoca quedó a cargo de la ciudad de Maastricht de forma ininterrumpida hasta la retirada de las tropas españolas tras la firma del Edicto Perpetuo el 4 de enero de 1577. En este tiempo, Montesdoca desempeñó una labor militar y política con el objetivo de mantener Maastricht bajo el área de control de la Monarquía Hispánica.

Como gobernador de Maastricht, una ciudad situada entre Arzobispado de Lieja y otros territorios pertenecientes al Imperio, Montesdoca desarrolló una intensa labor para obtener información sobre lo que ocurría al otro lado de los territorios bajo su jurisdicción. Ya desde antes del inicio de la Segunda Rebelión, Montesdoca tenía conocimiento de las labores de reclutamiento que el príncipe de Orange estaba desarrollando en los territorios del Imperio. [3] Gracias a su red de informantes, en especial a un agente en la ciudad de Colonia, Montesdoca tuvo conocimiento de algunos de los movimientos que se produjeron en el Imperio para preparar las campañas del príncipe de Orange en los Países Bajos. Aunque no lo sabemos con certeza, es posible muchas de las actividades interceptadas por los espías de Montesdoca estuviesen relacionadas con la campaña militar en la que Luis de Nassau participó como líder en la batalla de Mook en Abril de 1574. [4]

De sus casi diez años como gobernador de Maastricht, sin duda el momento más crítico que Montesdoca tuvo que afrontar fue el derivado de la crisis político-militar que siguió a la muerte de Luis de Requesens en marzo de 1576. El conflicto constante entre el poder político, de forma temporal en manos del Consejo de Estado; y el ejército de la Monarquía, cuya figura más visible fue el castellano Sancho Dávila, derivó en la publicación de varios edictos contra la presencia de las tropas de Felipe II en los Países Bajos. El Edicto de 22 de septiembre de 1576 declaraba a todos los soldados de Felipe II fuera de la ley autorizando, por tanto, cualquier actuación en su contra por parte de la población local. Este edicto puso a Montesdoca en una situación muy delicada como gobernador de Maastricht. Su autoridad fue contestada tanto por sus habitantes, como por los soldados alemanes a su cargo. La tensión en la ciudad aumentó progresivamente hasta que los Estados Generales nombraron a un nuevo gobernador para sustituirlo. En una carta a don Juan de Austria explicando lo sucedido, Montesdoca señala que los Estados Generales habían dado la orden de ‘degollarnos’, en referencia a los apenas 400 españoles que entonces se encontraban bajo su mando en la ciudad. [5] Las fuentes y relatos que existen sobre estos eventos coinciden en que Montesdoca fue privado de su libertad y forzado a entregar las llaves de la ciudad al nuevo gobernador. Antes de ello, y siempre siguiendo su relato de los hechos, ordenó a su segundo en mando, Martín de Ayala, que se dirigiese con el resto de soldados españoles a Wyck, al otro lado del río Mosa, para preparar un posible ataque a la ciudad llegado el caso. Tras una serie de negociaciones con sus captores, Montesdoca logró salir de su reclusión bajo excusa de apaciguar a sus tropas al otro lado del río. Con la ayuda de refuerzos de caballería e infantería bajo las órdenes de Alonso de Vargas y Hernando de Toledo respectivamente, Martín de Ayala y Montesdoca lanzaron un ataque sobre la ciudad que terminó con el saco de la misma por parte de las tropas del ejército de Felipe II el 20 de octubre de 1576.

Tras el famoso Saco de Amberes en los primeros días de noviembre, la situación de los soldados españoles en los Países Bajos se tornó aún mas delicada y contestada por la población local. Finalmente y junto con el resto de militares del ejército de la monarquía de Felipe II, Montesdoca abandonó los Países Bajos en la primavera de 1577.

Aunque parece que regresó de nuevo y luchó bajo el mandato de don Juan de Austria y posteriormente del Príncipe de Parma, la relevancia de sus actos no ha dejado huella documental tan específica como la relativa a la primera década del conflicto.

Los últimos años de su vida los pasó como gobernador de Orbitello (Italia), plaza en la que falleció en 1593 tras más de medio siglo al servicio de la Monarquía Hispánica como militar de sus ejércitos.

Beatriz Santiago Belmonte

25 Julio 2020

[1] R. Caro, Memorial de la villa de Utrera (Sevilla: 1883), p. 249.

[2] ibidem p. 255.

[3] Montesdoca to Alba. Maastricht. April 28 1571. AA B45 D45.

[4] Montesdoca to Albornoz. Maastricht, October 5 1573. AA B45 D79.

[5] Montesdoca to John of Austria (copy). Maastricht, 10 November 1576. AGS E. 569-173.

Fuentes

Correspondencia de Francisco de Montesdoca al Duque de Alba: Archivo Casa de Alba, Caja 45.

Archivo General de Simancas. Sección Estado Legajo 569

Bibliografía

Caro, Rodrigo, Memorial de la Villa de Utrera: autor el licenciado Rodrigo Caro, originally written in 1604, (Sevilla: El mercantil sevillano, 1883)

Fagel, Raymond, Álvarez Francés, Leonor and Santiago Belmonte, Beatriz (eds.), Early Modern War Narratives and the Revolt in the Low Countries (Manchester: 2020)

Gascoigne, George The Complete works of George Gascoigne , ed. by J. W. Cunliffe (Cambridge: 1910), II, 587-599.

Génard, Pierre, La Furie Espagnole: documents pour servir à l’histoire du sac d’Anvers en 1576 (Amberes: 1876)

Mendoza, Bernardino de, Comentarios de don Bernardino de Mendoça, de lo sucedido en las guerras de los Payses Baxos, desde el año de 1567 hasta el de 1577 (A Coruña: Órbigo, 2009)

Motley, J. Lothrop, The Rise of the Dutch Republic: A History (New York: 1898)

Parker, Geoffrey, The Dutch Revolt . Ithaca, N.Y.: Cornell University Press, 1977

Pidal, Marquis of and Salvá Miguel (eds.) Colección de documentos inéditos para la Historia de España (Madrid: Imprenta de la viuda de Calero, 1857).

Schoonbrood, M, and J. S Grossier, Schetsen uit de geschiedenis van Maastricht en omstreken (Nieuwendijk: De Forel, 1972)

Strada, Famiano, De bello Belgico The history of the Low-Countrey warres 1572-

Trillo, Antonio, Historia de la rebelión y guerras de Flandes con unos muy importantes y provechosos discursos en materia de guerra y estado, sacados de las historias griegas y romanas por Antonio Trillo … (Madrid: 1592)

Ubachs, P.J.H and Evers, Ingrid, Historische Encyclopedie Maastricht (Zutphen: Walburg Pers., 2005)

Weerdenburg, C.J. van, Maastricht in de tachtigjarige oorlog (Maastricht: 1948)